jueves, 9 de junio de 2011

Arte, música, empanadas y campaña

Por Juan Pablo Miganne (Crónica)
El patio mostraba una imagen bastante diferente a la de un museo. En un ambiente distendido, circulaban grandes cantidades de empanadas “historiográficas”, que hacían referencia a diferentes modelos económicos de la historia argentina. Se podía elegir entre las empanadas industria nacional, rellenas con carne picada a máquina y repulgue en serie, las empanadas renta financiera rellenas de roquefort y sin repulgue, o las llamadas agro-exportadoras, con carne cortada a cuchillo y repulgue artesanal. Todo esto acompañado de una copa de un vino tinto “nacional y popular” llamado El Justicialista, y disfrutando de números musicales en vivo.

La excusa fue la inauguración de la muestra “Economía y Política, 200 años de historia”, en la Casa del Bicentenario. Antes del peculiar ágape, en un escenario montado al aire libre, la directora de la institución, Liliana Piñeiro, presentó la exposición y los diferentes actores que participaron en el armado de esta propuesta interdisciplinaria. “Esta muestra recorre los debates y las tensiones de nuestra historia económica, sin omitir ninguna posición, pero subrayando la dimensión profundamente política e ideológica de los rumbos económicos que hemos transitado los argentinos”, destacó el secretario de Cultura de la Nación, Jorge Coscia.

Luego de las palabras del titular de Cultura, el periodista económico Alfredo Zaiat habló en nombre del equipo de asesores académicos de la exposición, que también integraron el economista y doctor en Historia Mario Rapoport, y el escritor y periodista Julio Fernández Baraibar. Zaiat invitó a “reflexionar sobre lo que pasó, para estar atento sobre lo que está pasando y, más importante, para emprender con saberes y convicciones la construcción de un futuro mejor para todos”.

Todo parecía un evento artístico, quizás académico, pero el clima cambió cuando subió al escenario el ministro de Economía, Amado Boudou. Luego de recibir abrazos y felicitaciones de todos los presentes, y en una clara actitud proselitista, el ministro enumeró las virtudes del actual gobierno y tomó el micrófono por un largo rato. “La economía, la política y la cultura son conceptos que se entrelazan. Es esta una visión que se está imponiendo. Yo estoy orgulloso de formar parte de un proyecto en el que la economía está subordinada al poder político. Si ustedes piensan en las distintas medidas que se tomaron desde 2003 hasta ahora, son profundamente políticas. Son decisiones políticas con instrumentación económica”, dijo Boudou.

Al finalizar el acto de apertura se invitó a los casi 700 presentes a recorrer la muestra artística desplegada en los cuatro pisos del edificio. Los que optaron por quedarse en el patio, disfrutaron de las empanadas y presenciaron los recitales de Liliana Herrero, Lidia Borda, Dolores Solá, Alfredo Piro, D-Mente, Fena Della Maggiora, Antonio Birabent y Pablo Dacal.

Cuando terminó el espectáculo musical, la concurrencia comenzó a dispersarse. Algunos se quedaron mirando una video instalación sobre algunos hitos de la historia económica argentina, otros seguían esperando en la puerta de la cocina intentando conocer las bondades de cualquiera de los modelos económicos comestibles, y la gran mayoría se quedó charlando, entre risas y copas.

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